El Año Nuevo es una festividad que se realiza el día 1 de enero de cada año. Consiste en la finalización de un período de tiempo y el comienzo de un nuevo ciclo. La fecha del Año Nuevo corresponde a un día feriado en el calendario laboral, por lo que la mayoría de la población toma la jornada para descansar y renovar energías. La celebración del Año Nuevo es una tradición muy antigua que viene desde la época Romana. Entonces, se cerraba un ciclo adorando a los dioses y agradeciendo todas las venturas y las buenas cosechas. En la Ciudad de Buenos Aires, y en otras capitales del territorio, existen diversas tradiciones y formas de celebrar la llegada del Año nuevo. El 31 de diciembre conocido también como la Nochevieja, los argentinos suelen reunirse para celebrar la cena de Fin de Año en familia, pues de esta forma se cree que en el Año Nuevo se mantendrán juntos. Para atraer la buena suerte en el Año Nuevo, las personas suelen usan una bombacha rosa en la noche de Fin de Año. Bordeando las 12 campanadas que dan la bienvenida al Año Nuevo, los argentinos suelen comer las 12 uvas mientras piden deseos a cumplirse en el año que recién comienza. Esta es una tradición antigua y muy presente en los hogares argentinos. En Argentina es tradicional salir a ver los fuegos artificiales que iluminan y engalanan la ciudad. En Puerto Madero, por ejemplo, a orillas del Río de la Plata, la gente suele reunirse a ver los espectáculos de pólvora que organizan las municipalidades. En la ciudad de la Plata se viene haciendo parte de la tradición el elaborar un muñeco lleno de paja o aserrín al que llaman “Año Viejo”, este es quemado la madrugada del 1 de enero. La elaboración de las hogueras es un acto de la comunidad que se va haciendo popular con el correr de los años.
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